Acaba de ocurrir lo peor que te podría suceder: te han rechazado. Acabas de recibir la carta, el e-mail o el fax; o bien, recibiste la indirecta en una conversación telefónica. La angustia te ha embargado poco a poco, a medida que te has ido dando cuenta de que te han rechazado. Puede tratarse de un empleo que deseabas mucho, de un curso al que querías desesperadamente asistir, de un amante de quien estás profundamente enamorad@ o, tal vez, un amig@ de siempre ha dado la espalda a tu amistad y te ha abandonado.
¿Cómo se manifiesta el rechazo?
Si ya nos han rechazado muchas veces, el rechazo se convetirá en un dolor familiar muy intenso, precisamente porque nos es familiar. Tal vez lloremos mucho o, por el contrario, no podamos soltar ya ni una sola lágrima.
En un estado de rechazo agudo, podemos pensar que "todo" nos rechaza. Probablemente sintamos que nuestro mundo está hecho añicos y todo lo que nos rodea adquiere un tono angustiante. No es así en realidad, claro, pero el trauma del rechazo es una emoción global que lo impregna todo.
Las emociones relacionadas con el rechazo incluyen:
- La rabia: "¿Cómo han podido hacerme esto a mi?"
- La depresión: "Recuerdo este horrible sentimiento, quizá me convenga no volver a esperar nada nunca más y sumirme en la desesperación".
- El odio: "Lo odio por haberme hecho esto", o bien "Me odio a mi mismo porque siempre me ocurre lo mismo".
- El miedo: "¿Qué será de mí ahora?"
Superar el miedo al rechazo. Nuestro equipo de psicólogos en Valencia te enseña
Cuando experimentas el rechazo, tienes la sensación de estar viviendo el peor momento de tu vida. Y quizás lo sea.
Sin embargo, es también un momento de tremendo potencial. Cuesta creerlo, pues tendemos a asociar el rechazo al dolor que causa. En cambio, el rechazo esconde una puerta abierta de nuevas posibilidades en nuestro apasionante viaje por la vida.
Veamos cómo hacerlo:
El miedo al rechazo esconde los fantasmas de todos los rechazos anteriores así que, para superarlo, debemos entender también cómo esos rechazos del pasado impregnan y afectan a nuestra forma de pensar.
Además, superar el miedo rechazo implica aprender a ver el rechazo desde otras perspectivas. Éstas incluyen entender cómo nos rechazamos a nosotros mismos y cómo establecemos pautas de repetición del rechazo. Aprenderás, entonces, a cambiar el sistema de creencias que te impiden encontrar la parte positiva del rechazo, a no dejarte paralizar por él y a avanzar hacia la siguiente fase, que está llena de posibilidades.
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