Relaciones sexuales después del cáncer de mama
Antes de nada, quisiera decir que trabajar con mujeres que padecen una enfermedad que amenaza su vida, nos hace situarnos a los psicólogos en un papel real: «Estamos aquí y ahora contigo, para hablar, esclarecer, confrontar. Te ayudamos».
El diagnóstico y tratamiento del cáncer de mama es una experiencia estresante para la mujer que lo sufre. Los tratamientos médicos suelen provocar efectos secundarios desagradables como problemas en las relaciones sexuales, náuseas, dolor, neuropatía, fatiga y cambios corporales permanentes.
Además, la experiencia de cáncer de mama provoca también un impacto significativo en las parejas que también se enfrentan a los desafíos emocionales de esta enfermedad.
En la mayoría de los casos de cáncer de mama, la imagen corporal está alterada por la alopecia como efecto secundario de la quimioterapia, pero sobre todo cuando ha sido necesario hacer mastectomía. Como sabemos, la mama tiene que ver mucho con la femineidad, con el sentirse mujer. Su falta en un primer momento es vivida como alteración de la misma, es frecuente escuchar a las pacientes decir “ya no me siento mujer” y como consecuencia influye en el deseo sexual y en las relaciones sexuales.
Ana, 45 años, cáncer de mama
Veámoslo con un ejemplo de un caso de una pareja que completó cinco sesiones para la mejora de la intimidad y de sus relaciones sexuales:
Ana, mujer de 45 años, y había sido diagnosticada de cáncer de mama. Se le había realizado una masectomía radical unos cinco meses antes del inicio de las sesiones. Su pareja, Francisco, de aproximadamente la misma edad, acudió a la terapia junto a ella. Llevaban casados unos quince años y tenían dos hijos.
Psicólogo: ¿Puedes contarme cómo te ha afectado el cáncer emocionalmente y sexualmente?
Estas fueron algunas de las respuestas de Ana:
Ana: «A mí me influyó que en la primera sesión de quimioterapia me tuve que cortar el pelo, porque enseguida se me empezó a caer. Me puse gorritos, nunca me puse peluca porque no me gustaba. La verdad es que llevé mal quedarme sin pelo, y en lugar de llorar porque tenía una enfermedad muy grave, que me podía morir, lloraba por mi aspecto físico.
Antes del cáncer, estaba contenta con mi cuerpo. Ahora, cuando me veo, me da tristeza. A raíz de la mastectomía no he tenido relaciones sexuales por falta de deseo, no me siento mujer. Recuerdo mucha tristeza, cuando llegué a casa lloré como no había llorado antes. Me encontraba mal, quería acabar con ello haciéndome la reconstrucción, dejé de sentirme femenina, de tener deseos sexuales, de salir, de arreglarme. Me sentía disminuida y así me siento, no me siento atractiva ni nada de nada, me he acostumbrado a verme, pero no me gusto.
Estoy muy cansada físicamente y me veo a mil años luz de cómo yo estaba, que no tengo pelo, que no tengo pecho, que no tengo ilusión… Me veo hecha polvo.
Terapia para mejorar las relaciones sexuales
A lo largo de las sesiones:
- Exploramos cómo el cáncer de mama había había cambiado la expresión de la sexualidad del uno al otro, preguntando abiertamente a ambos cuáles eran los aspectos sexuales que querían tratar.
- Tanto Ana como Francisco expresaron cierta vergüenza al hablar del tema, pero fueron capaces de expresar su deseo de mantener una relación sexual de intimidad con su pareja.
- Ambos se comprometieron con la realización de tareas para casa que incrementaron la intimidad física y emocional, en forma de ejercicios sexuales.
- Y utilizamos las habilidades de comunicación, particularmente la capacidad de escucharse el uno al otro, así como la solución de problemas para ayudarles a desarrollar soluciones concretas para generar los cambios deseados en sus relaciones sexuales.
Las terapias relacionadas con el afrontamiento psicológico del cáncer de mama y la mejora de las relaciones sexuales son motivo habitual de consulta en nuestro centro de psicología en Valencia. También terapia online para aquellos que no pueden desplazarse hasta Valencia. Si es tu caso, no lo dudes: ¡Llámanos! ¡Te ayudamos!